Aunque no me gustan algunos libros de Gabriel García Márquez, este me gusta mucho, es el relato de un naufrago a un joven periodista, sobre los diez días que paso a la deriva en una balsa sin comer ni beber, que fue proclamado héroe de la patria, besado por las reinas de la belleza y hecho rico por la publicidad, y luego aborrecido por el gobierno y olvidado para siempre.
El joven periodista se llama Gabriel García Márquez. "En veinte sesiones de seis horas diarias logramos reconstruir el relato compacto y verídico de sus diez días de mar. Era tan minucioso y apasionante que mi único problema literario sería conseguir que el lector lo creyera."
"En todo momento traté de defenderme. Siempre encontré un recurso para sobrevivir, un punto de apoyo, por insignificante que fuera, para seguir esperando. Pero al sexto día ya no esperaba nada. Yo era un muerto en la balsa. En la tarde, pensando en que pronto serían las cinco y volverían los tiburones, hice un desesperado esfuerzo por incorporarme para amarrarme a la borda. En Cartagena, hace dos años, vi en la playa los restos de un hombre destrozado por el tiburón. No quería morir así. No quería ser repartido en pedazos entre un montón de animales insaciables."
"En todo momento traté de defenderme. Siempre encontré un recurso para sobrevivir, un punto de apoyo, por insignificante que fuera, para seguir esperando. Pero al sexto día ya no esperaba nada. Yo era un muerto en la balsa. En la tarde, pensando en que pronto serían las cinco y volverían los tiburones, hice un desesperado esfuerzo por incorporarme para amarrarme a la borda. En Cartagena, hace dos años, vi en la playa los restos de un hombre destrozado por el tiburón. No quería morir así. No quería ser repartido en pedazos entre un montón de animales insaciables."